Pedro Comesaña, autor de Emética (Mentes Distintas), que será proyectada en la Mostra dentro del Ciclo Cine Recuperado e Inédito de Galicia, nos cuenta cómo fue su primer contacto con el mundo de la imagen.
Emética es el resultado de mi primer contacto con el mundo de la imagen y como consecuencia el/la culpable de que quisiera dedicar mi vida profesional al mundo del cine y del audiovisual. En el año 1981, con diecisiete años, en un pueblo de los alrededores de Vigo había muy pocas opciones de introducirse en el mundo del audiovisual. Ni siquiera había escuelas de fotografía y mucho menos de imagen y sonido. Solo había dos canales de televisión la 1 y la 2 e Internet era ciencia-ficción.
Pedro Comesaña, author of Emética (Mentes Distintas) -short that will be screened at (S8) within the sectionRetrieved and Unpublished Galicia’s Cinema- talks us about his first experience with the image world.
Emética is the result of my first contact with the world of images and consequently he/she became the reason why I decided to dedicate my career to the cinema and the audiovisual world. In 1981, when I was seventeen, in the surroundings of Vigo there were few options to get into the audiovisual world. Not even there were photography schools and much less, Audiovisual Schools. There were only two TV channels, the 1 and the 2, and Internet was science fiction.
Pedro Comesaña, autor de Emética (Mentes Distintas), que se proxectará na Mostra dentro do Ciclo Cine Recuperado e Inédito de Galicia, cóntanos como foi o seu primeiro contacto co mundo da imaxe.
( Texto orixinal en Español )
Emética es el resultado de mi primer contacto con el mundo de la imagen y como consecuencia el/la culpable de que quisiera dedicar mi vida profesional al mundo del cine y del audiovisual. En el año 1981, con diecisiete años, en un pueblo de los alrededores de Vigo había muy pocas opciones de introducirse en el mundo del audiovisual. Ni siquiera había escuelas de fotografía y mucho menos de imagen y sonido. Solo había dos canales de televisión la 1 y la 2 e Internet era ciencia-ficción.
El destino hace que un tío mío se compre una cámara de superocho para hacer películas familiares y ahí se abre la posibilidad de acercarme a la imagen de forma creativa.
Con un librito de 200 consejos prácticos como única ayuda técnica, unos ahorrillos para comprar y posteriormente enviar a revelar los cartuchos de superocho y un derroche de ganas de hacer algo distinto a las películas tradicionales familiares, me lanzo junto con un amigo a la aventura de rodar emética. Emética es el resultado de las inquietudes artísticas de dos jóvenes que influenciados por la literatura de terror y los movimientos musicales de los ochenta como joy division, sex pistols, Lou red, Iggi pop, David Bowie y más cercanos como siniestro total y eméticos…. Intentaron crear algo original y no convencional.
Ironías del destino, ahora después de treinta años en un cajón, y casi por casualidad va a ser proyectada por primera vez. Soy consciente de las imperfecciones técnicas y narrativas de este cortometraje. Aún así no he querido tocar absolutamente nada para intentar mejorarlo. El montaje es muy mejorable pero la esencia de emética radica precisamente en eso. Las imperfecciones técnicas: malos encuadres, movimientos de cámara defectuosos, desenfoques, mal montaje… en este caso, a mi juicio, hoy ya un juicio profesional, le otorgan un carácter con una personalidad incuestionable y un veneno artístico que hace que todas esas imperfecciones sumen a su favor consiguiendo una mayor fuerza y un mayor impacto visual.
Además de todos los fallos producto del desconocimiento y falta de profesionalidad, he de resaltar que en una proyección privada, con la intención de grabar en vídeo este experimento audiovisual, para así poder visualizarlo con más comodidad, ocurrió que en el transcurso de la grabación se fue la luz, inexplicablemente, dos veces y cada vez que esto ocurrió el proyector destruyó dos trozos de la película original, perdiéndose así para siempre. Lo que contribuye a que la historia esté mutilada y en consecuencia de lugar a diferentes interpretaciones lo que se insinúa. No obstante si esto ocurrió es porque tenía que ocurrir y que cada uno interprete lo que quiera de este ejercicio maldito y experimental.
Emética en los casi treinta años de existencia siempre fue una película muda. Jamás, hasta ahora, había llevado a cabo la incorporación de una música que la acompañara. A petición de los responsables de la Organización de este certamen que me sugirieron la posibilidad de dotarla de un ambiente sonoro acorde, me puse manos a la obra y contacté con la persona idónea para crear ese universo sonoro que acompañara las imágenes. El colíder del grupo eméticos, grupo musical maldito de los años ochenta del extrarradio de Vigo y fuente de inspiración, en cierta medida, de emética es el encargado de realizar la música siguiendo la misma precariedad de medios y explorando en las sensaciones sonoras en una especie de pega y corta a modo de reciclaje de músicas ya existentes de diferentes autores, extrayendo fragmentos de unas y otras y mezclándolos, componiendo de este modo tan poco convencional como adecuado e innovador el ambiente sonoro que ya, para siempre, acompañará a emética.
La única razón por la que he accedido a que se proyecte Emética es por puro romanticismo. Su existencia marcó mi destino y desde esta perspectiva para mí tiene un claro componente sentimental, emocional y nostálgico.
Destiny wanted that one of my uncles bought a Super8 camera to tape familiar films, and just right then I had the possibility to get closer to the image from a creative way.
With a small book with 200 practical pieces of advice as the only technical help, some savings to buy and later send to develop the Super8 cartridges and a great display of willingness to do something different from the traditional familiar films, I decide, together with a friend of mine, to jump on the adventure of filming Emética. Emética is the result of the artistic interests of two young men that being influenced by the horror literature and the musical movements of the 80ies such as Joy Division, Sex Pistols, Lou Reed, Iggi Pop, David Bowie and other groups closer to our time, Siniestro Total and Eméticos…They tried to create something original and not conventional.
Ironies of destiny, now after resting 30 years in a drawer, and nearly by coincidence, it is going to be screened for first time. I am conscious about the technical and narrative imperfections of this short movie. Even so, I did not want to touch absolutely anything so as to try and improve it. Editing could still be improved, but the essence of Emética lies just in this fact. The technical imperfections: wrong framings, faulty movements of the camera, lack of focus, wrong editing…in this case, from my point of view -nowadays a professional judgment- these imperfections give Emética a character with an unquestionable personality and an artistic poison that get all these defects to add up in its advantage obtaining a higher strength and a greater visual impact.
Besides all these mistakes result of the ignorance and lack of professionalism, I must highlight that during a private showing -with the intention of video taping this audiovisual experiment and therefore be able to watch it with a greater comfort- the electricity inexplicably went off twice during the video recording, and consequently the projector destroyed two pieces of the original film, thus losing them forever. This fact contributes the history to be disabled and consequently it could be found different interpretations of what it is already implied. Nonetheless, if this accident took place is because it was meant to be, and each one of us is free to interpret whatever we want about this damned and experimental exercise.
Emética, during its almost 30 years of existence it has always being a dumb movie. Never, until now, it has being incorporated music to accompany it. At (S8)’s organizing team request suggesting me the possibility to provide it with an appropriate soundscape, I got in contact with the suitable person to create this universe of sound that would accompany the images. The co-leader of the group Eméticos -damned musical group from the 80ies coming from the surroundings of Vigo and, in some way, Emetica’s source of inspiration- is the one responsible for the music edition following the same scarcity of resources and exploring into the feelings of sound as some kind of cut and paste way of recycling already existing music from different authors, removing fragments and mixing them, composing in such a unconventional and suitable manner the soundscape that will always accompany Emética.
The only reason why I agreed to screen Emética is due to pure romanticism. Its existence marked my destiny and from this perspective, it has a clear sentimental, emotional and nostalgic ingredient for me.
El destino hace que un tío mío se compre una cámara de superocho para hacer películas familiares y ahí se abre la posibilidad de acercarme a la imagen de forma creativa.
Con un librito de 200 consejos prácticos como única ayuda técnica, unos ahorrillos para comprar y posteriormente enviar a revelar los cartuchos de superocho y un derroche de ganas de hacer algo distinto a las películas tradicionales familiares, me lanzo junto con un amigo a la aventura de rodar emética. Emética es el resultado de las inquietudes artísticas de dos jóvenes que influenciados por la literatura de terror y los movimientos musicales de los ochenta como joy division, sex pistols, Lou red, Iggi pop, David Bowie y más cercanos como siniestro total y eméticos…. Intentaron crear algo original y no convencional.
Ironías del destino, ahora después de treinta años en un cajón, y casi por casualidad va a ser proyectada por primera vez. Soy consciente de las imperfecciones técnicas y narrativas de este cortometraje. Aún así no he querido tocar absolutamente nada para intentar mejorarlo. El montaje es muy mejorable pero la esencia de emética radica precisamente en eso. Las imperfecciones técnicas: malos encuadres, movimientos de cámara defectuosos, desenfoques, mal montaje… en este caso, a mi juicio, hoy ya un juicio profesional, le otorgan un carácter con una personalidad incuestionable y un veneno artístico que hace que todas esas imperfecciones sumen a su favor consiguiendo una mayor fuerza y un mayor impacto visual.
Además de todos los fallos producto del desconocimiento y falta de profesionalidad, he de resaltar que en una proyección privada, con la intención de grabar en vídeo este experimento audiovisual, para así poder visualizarlo con más comodidad, ocurrió que en el transcurso de la grabación se fue la luz, inexplicablemente, dos veces y cada vez que esto ocurrió el proyector destruyó dos trozos de la película original, perdiéndose así para siempre. Lo que contribuye a que la historia esté mutilada y en consecuencia de lugar a diferentes interpretaciones lo que se insinúa. No obstante si esto ocurrió es porque tenía que ocurrir y que cada uno interprete lo que quiera de este ejercicio maldito y experimental.
Emética en los casi treinta años de existencia siempre fue una película muda. Jamás, hasta ahora, había llevado a cabo la incorporación de una música que la acompañara. A petición de los responsables de la Organización de este certamen que me sugirieron la posibilidad de dotarla de un ambiente sonoro acorde, me puse manos a la obra y contacté con la persona idónea para crear ese universo sonoro que acompañara las imágenes. El colíder del grupo eméticos, grupo musical maldito de los años ochenta del extrarradio de Vigo y fuente de inspiración, en cierta medida, de emética es el encargado de realizar la música siguiendo la misma precariedad de medios y explorando en las sensaciones sonoras en una especie de pega y corta a modo de reciclaje de músicas ya existentes de diferentes autores, extrayendo fragmentos de unas y otras y mezclándolos, componiendo de este modo tan poco convencional como adecuado e innovador el ambiente sonoro que ya, para siempre, acompañará a emética.
La única razón por la que he accedido a que se proyecte Emética es por puro romanticismo. Su existencia marcó mi destino y desde esta perspectiva para mí tiene un claro componente sentimental, emocional y nostálgico.